Boca arrancó el verano con una derrota por la mínima frente a Estudiantes en Mar del Plata. El conjunto de Carlos Bianchi, plagado de suplentes y juveniles, cayó por 1-0 en un cotejo de ida y vuelta que se desequilibró por un gol de Gastón Gil Romero cuando corrían 60 minutos de juego.
Pudo ser para ambos, pues se multiplicaron las ocasiones netas en ambas áreas y el elenco platense se encontró con la victoria por un tanto fortuito tras un remate que se desvió y descolocó al arquero Emanuel Trípodi.
Fue así que Boca comenzó el verano con una caída que no es medida de lo que vendrá ya que Bianchi paró a suplentes y juveniles desde el arranque y se guardó a los titulares para enfrentar a River el próximo sábado.
Sin embargo, en la primera mitad, el elenco vestido por última vez de rosa mostró ratos de buen fútbol y hasta pudo ponerse en ventaja de no ser por la gran actuación de Gerónimo Rulli, golero de Estudiantes, quien evitó al menos tres situaciones claras por parte del xeneize.
Probando nuevo esquema y priorizando el cero en su arco más que la generación de juego y nutrir de asistencias al único punta, Boca careció de profundidad y sólo llegó por intentos aislados. De hecho, en el complemento el ingreso del juvenil Guido Vadalá en reemplazo de Claudio Riaño dejó sin delanteros netos al equipo.
Francesco Celeste y Nicolás Colazo fueron de lo mejor de Boca en el primer período y gozaron de oportunidades para marcar, pero se toparon con Rulli. En tanto, en el complemento fue Guillermo Burdisso quien tuvo el empate con un frentazo desde el área chica, pero otra vez el arquero de Estudiantes se hizo gigante en su arco.
Enfrente, Trípodi fue de menor a mayor. Comenzó con dudas en los centros y con fallas desde sus pies, pero levantó en el final. Nada pudo hacer en el minuto 60, cuando una distracción defensiva dejó una bola en la medialuna que remató Gil Romero y que, desvío mediante, ingresó mansa en el arco xeneize. Luego, más cerca del cierre del partido, Franco Jara y los ingresados Román Martínez y Carlos Auzqui tuvieron chances para sellar la victoria, pero el guardametas ex Quilmes apareció y demostró sus cualidades para ser suplente de Agustín Orión.
La novedad del partido y tal vez lo más destacado para los hinchas xeneizes además del debut del rosarino Vadalá (que jugó muy solo arriba), fue la vuelta a las canchas de Diego Rivero tras una larga inactividad. El ex San Lorenzo vio la amarilla pero comenzó a moverse para el próximo semestre.
De ese modo, Boca comenzó el torneo de verano con una derrota frente a los titulares de Estudiantes que venían de igualar frente a River y este ensayo le sirvió a Bianchi para probar el nuevo esquema y alinear a algunos jóvenes que se destacaron en las divisiones menores.